top of page

Y ¿cuándo dejé de ser yo?

Actualizado: 20 mar 2020

¿Te ha ocurrido que has vivido toda la vida contigo, has ido conformando una identidad a través del tiempo y la experiencia pero... un día, atrapado en la rutina, te descubres como un desconocido? Bueno, eso fue exactamente lo que me pasó hace más o menos un año. Considero que me conozco bastante bien, en mis mejores y peores momentos, pero no lograba comprender por qué me sentía tan distinta a quien deseaba ser. Mi terapeuta me explicó sabiamente que, cuando uno no está en línea con lo que siente, lo que piensa, lo que dice y lo que hace, internamente el desequilibrio es el protagonista. Podremos aparentar ante el mundo entero, pero nunca ante nosotros mismos.


¿Te suena? No es extraño que la rutina nos absorba, los horarios nos limiten y las prioridades estén mal definidas, en consecuencia, es común que olvidemos darnos tiempo para conectar con nosotros mismos, cultivar nuestra vida interior y reflexionar acerca de lo que hemos vivido en nuestro día y hacia dónde vamos.


Algunos ingredientes que considero indispensables para cocinar la apatía y la inseguridad son:

1. Olvidar que vales por quién eres y poner tu valor fuera de ti.

Eso significa que con frecuencia estás preocupado por lo que piensen los demás de ti, de lo que haces, de cómo luces, de tus logros, de tus gustos... y ¿qué decir de la angustia existencial que provoca el que alguien que amas se enoje contigo?

Cuando todos estos pensamientos invaden tu mente y te generan angustia, nervio o preocupación, es una clara señal de que eres inseguro y que tu autoestima necesita reparación.


2. Considerar que los demás son mejores que tú.

Recuerda que la vida no es una competencia con los demás, claro que hay situaciones en las que puede darse, pero el sentido profundo se encuentra en competir con tu YO de ayer, en buscar ser mejor persona, amigo, hijo, vecino, hermano, etc. En levantarte cuando suena el despertador, hacer tu cama, llegar a tiempo, comer saludable y cualquiera de esas pequeñas metas que tengas en la mira.

Si nos comparamos, inevitablemente anhelaremos la vida de otras personas porque no estamos mirando ni valorando la prorpia riqueza. Una vez asumida, la vida de los demás surtirá en nosotros la insipración y la creatividad, en lugar de la envidia y la victimización.


3. El Autosabotaje

No debemos menospreciar este concepto, está más presente en nuestras vidas de lo que creemos. ¿Cuántas cosas de las que dijiste el mes pasado que harías este realmente has ejecutado?

A menudo el autosabotaje se presenta porque no confiamos en que podemos hacer las cosas, porque no damos mérito a nuestros talentos, porque no nos creemos merecedores del amor, del reconocimiento, del éxito, entre otros.

Date un tiempo para pensarlo. La única manera de librarte de él es reconciéndolo y haciendo un plan de acción para enfrentarlo.

Te comparto todo esto porque es lo que a mí me ayudadó a recuperarme a mí misma. Te deseo que pronto recuerdes el gran valor que tienes por el hecho de ser tu, así tal cual eres.


Ahora te daré algunos pequeños consejos para que los pongas en práctica a la brevedad. Independientemente de que te sientas desconectado o no de ti.


1. Felicítate por reconocer y validar tus sentimientos, ese es el primer gran paso para empezar a solucionar y avanzar.

2. No dejes de hacer nada que sea parte de ti, de tu esencia ni de tu felicidad por agradarle a alguien o porque eso no le gusta o le molesta. (Claro está que no sea algo que te dañe a ti ni a los demás.).

3. Recuerda como eras en los momentos que más pleno te has sentido contigo mismo, ejemplo: bailando, cantando, riendo, conviviendo, trabajando, para que tengas presente la imagen de ti en tus mejores momentos y sea tu referencia de cómo puedes volverte a sentir y a estar.


Apartarte de tus amigos, de tu familia, evitar las situaciones que te mueven de tu zona de confort, descuidar tu salud, no practicar las actividades que te hacen vibrar y continuar tu vida como si fueras un robot, te diluye.


Busca ayuda si te sientes de esta manera, hay muchas personas preparadas para apoyarte.


Yo no hago este trabajo personal sola, y la toma de conciencia de lo que me estaba ocurriendo me llevó a decidir tomarme un tiempo para reencontrarme y descubrir hacia donde quería dar mi siguiente paso y ¡lo he descubierto!


He decidido escribir para chicos y grandes, contenido que considero valioso y fundamental para el desarrollo integral. Mi intención al compartir mucho de lo que he aprendido, tanto personal, como profesionalmente, es aportar al crecimiento de la vida interior de quienes me lean o escuchen en mis podcasts.


Hoy, después de un arduo trabajo personal, renovada y en un gran momento de mi vida, me siento llena de energía y claridad para llevar a cabo esta pasión por escribir.

Las ideas fluyen y en ocasiones hasta se atropellan, mi reto está en darles el mejor orden y cauce.


En fin, he vuelto a ser yo, escuchando mi corazón, enfrentando mis miedos, aceptándome con mis cualidades y defectos, apoyandome en mis seres queridos y en mi terapeuta, he recuperado la confianza en mí, he puesto en altavoz a mi intuición y estoy dispuesta a seguir trabajando en mí, por que el aprendizaje es contínuo y permanente.


Con gran alegría iré compartiendo en esta página, en mis redes sociales y eventualmente en material físico, información valiosa. Deseo de todo corazón que los enriquezcan.

Me despido de ésta, mi carta de autobienvenida con cariño y agradecimiento.


Namasté

Amaya


ree

 
 
 

Comentarios


Publicar: Blog2_Post

Formulario de suscripción

¡Gracias por tu mensaje!

  • Instagram
  • Facebook
  • LinkedIn

©2019 por Aprendiz De Magia Interior. Creada con Wix.com

bottom of page